Holomega Nutrimielin · Equisalud · 180 cápsulas

Regenera las capas protectoras de las fibras nerviosas (mielina) por medio del hongo Hericium, potenciándose su biodisponibilidad con vitamina C en aquellos casos en los que la mielina está comprometida (Alzheimer, esclerosis múltiple, esclerosis lateral amiotrófica, etc... Los demás componentes potencian la formación de neurotransmisores como la acetilcolina o la dopamina, mejorando la función cerebral y los trastornos neuromusculares.

Composición por cápsula:

• 250 mg de extracto seco de melena de león (Hericium erinaceus, cuerpo de hongo).
• 100 mg de Acetil -L- carnitina HCl.
• 50 mg de L-treonina.
• 50 mg lecitina de soja (Glycine max.,>20% Fosfatidil L-Serina).
• 50 mg de L-Leucina.
• 50 mg de L-Isoleucina.
• 50 mg de Valina.
• 30 mg de vitamina C (Ascorbato cálcico).

Modo de empleo:

Tomar 3 cápsulas al día, diez minutos antes de las principales comidas.

Presentación:

Envase de 180 cápsulas.

Propiedades de los principios activos:

• Melena de León (Hericium erinaceus): Posee un alto contenido en aminoácidos esenciales (aporte proteico) y en oligoelementos no muy usuales como el selenio o el germanio. También tiene zinc, fósforo, hierro o potasio. Es muy conocido por su tropismo hacia el sistema nervioso y digestivo. Tiene un potencial terapéutico elevado en la nutrición y regeneración de la mielina, capa protectora de las fibras nerviosas. A su vez es un excelente regenerador de la mucosa digestiva (ver Holomega Hericium). Su efecto beneficioso, como en tantos productos naturales, depende de su unión entre componentes, tal como está en la naturaleza, actuando la sinergia entre ellos, por lo que es recomendable utilizar extractos enteros del mismo y no de sus partes. Está indicado como una excelente ayuda en las personas con demencia senil, Alzheimer, insuficiencia cognitiva, esclerosis múltiple, esclerosis lateral amiotrófica y todas las afecciones donde la mielina esté comprometida. Aparte de los minerales mencionados, contiene todos los aminoácidos esenciales, polisacáridos inmunorreguladores (betaglucanos). Tiene efecto antitumoral debido a la presencia de los factores: FII 1 y FIII 2b, hericenonas y erinacinas. Unos principios activos, denominados hericenonas A, B, C, D y E, inducen la producción del Factor de Crecimiento de Tejido Nervioso (NGF), sustancia que a su vez estimula la regeneración de las neuronas cerebrales dañadas. Esta acción ocurre “in vitro” pero también” in vivo”. Es un protector frente al estrés oxidativo (Kawagishi H.). Estimula el desarrollo normal de las células del cerebelo, con un proceso también regenerador de la síntesis de la mielina, “in vitro” (Kolotushkina EV). Se ha visto que es neuroprotector frente a la isquemia cerebral, siendo una buena ayuda como preventivo de infartos cerebrales (Michiochiro F.). Maldovan MG demostró que tiene una acción neurotrópica, mejorando el proceso de mielinización de las fibras maduras, y sin afectar al crecimiento de la célula nerviosa. Este hongo es biológicamente activo frente al deterioro cognitivo leve y demencia (HDS).
• Vitamina C: Se aporta la vitamina C para facilitar la biodisponibilidad del hongo Melena de león. Esto se debe a que la vitamina C atrae agua en el intestino, haciendo más solubles las fibras de polisacáridos del hongo, favoreciendo la fermentación producida por la flora intestinal y por tanto la absorción de los betaglucanos, que son partidos para poder penetrar a través de la mucosa. Por otro lado, la vitamina C tiene una acción química, favoreciendo la metabolización de los polisacáridos y además, por su acción intracelular como sistema redox, evita las oxidaciones perjudiciales.
• L-Treonina: La treonina es un aminoácido esencial, por lo que no puede sintetizarse en el organismo y debe ser ingerido en la dieta. Es un importante componente en la formación de proteína, colágeno, elastina y esmalte dentario. Y muy importante en la formación de neurotransmisores y para la salud del sistema nervioso. En la esclerosis lateral amiotrófica o enfermedad de Lou Gehrig, se ha visto que hay niveles bajos de glicina en el sistema nervioso central, lo que hace pensar que su suministro puede favorecer a estos enfermos. Pero la glicina penetra con dificultad en el sistema nervioso central, y por ello, es mejor utilizar la treonina para estos fines, que es precursor natural de la glicina y sí puede penetrar mejor al sistema nervioso central. También se han hecho experiencias en la esclerosis múltiple, con resultados positivos en la sintomatología. Se usa también en la depresión, como antiviral por su acción moduladora de la inmunología y como agente lipotrófico, evitando la acumulación de grasa en el hígado.
• Acetil-L-Carnitina: Derivado de la carnitina. Se encuentra sobre todo en los músculos, testículos y cerebro. Mejora la función cerebral porque interfiere en el metabolismo energético de las neuronas cerebrales, potencia la actividad de la acetilcolina y ayuda a eliminar residuos cerebrales. Mejora la memoria, la atención y el rendimiento mental en personas normales y en personas con el cerebro dañado. Podría enlentecer el desarrollo del Alzheimer. La insuficiencia circulatoria cerebral y el daño producido por una isquemia cerebral, pueden ser reducidos con el ALC, lo que hace pensar que es un neuroprotector y neuroregenerador importante. Reduce el daño producido por los radicales libres tras la isquemia (ictus). Es un tónico cardíaco, reduce el colesterol y los triglicéridos, potencia la energía (en debilidad muscular o en el síndrome de fatiga crónica). Es de utilidad en alcohólicos porque reduce los síntomas de la abstinencia y el daño causado a las células cerebrales por el alcohol. Se emplea en neuropatías periféricas con éxito. Puede ayudar en la enfermedad de Peyronie, que afecta al funcionamiento del pene. También es útil en las cataratas de los diabéticos. Se ha probado con buenos resultados en la amenorrea hipotalámica.
• Fosfatidilserina: Está presente en la lecitina y es el principal fosfolípido del cerebro. Es un compuesto del aminoácido serina. Cruza con facilidad la barrera hematoencefálica. Reduce los efectos adversos del estrés y previene el envejecimiento de las neuronas. Mejora la memoria y la agudeza mental así como la fluidez verbal, tanto en adultos como en jóvenes. Mejora la función cognitiva y repara los daños cerebrales. Dichas propiedades se deben a la capacidad que tiene de aumentar el número de receptores de la acetilcolina en el cerebro. Este neurotransmisor es vital para potenciar la memoria, el aprendizaje y la atención. Estimula también la liberación de dopamina, neurotransmisor cerebral que tiene que ver con el estado de ánimo. Estimula las reacciones metabólicas relacionadas con la glucosa, que es la principal fuente de energía cerebral. Actúa previniendo cambios metabólicos nocivos en la constitución lipídica de las membranas celulares. Tiene que ver con la fluidez y la integridad de las membranas celulares. Es usada por los atletas, ciclistas, para mitigar el exceso de cortisol producido por el estrés al hacer deporte y esto hace que se desarrolle la musculatura de forma más eficaz. Puede ser útil en la demencia senil y en el Alzheimer. Mejora la sintomatología de la depresión y eleva el estado de ánimo.
• Leucina, Isoleucina y Valina (BCAAs) (aminoácidos ramificados): Aminoácidos con una estructura química diferente, debido a sus uniones moleculares con grupos metilo. Las acciones de estos aminoácidos son variadas, pero en este caso se han incluido por su acción concreta sobre los trastornos neuromusculares, por ejemplo, en la esclerosis lateral amiotrófica o en la degeneración espinocerebelar. Mejora la resistencia muscular y la función motora se pierde con más lentitud. Se sabe que estos aminoácidos son capaces de activar la enzima glutamato deshidrogenasa, enzima que es deficiente en la esclerosis lateral amiotrófica. Otras acciones de estos aminoácidos ramificados son: reparación y desarrollo muscular y mejora del rendimiento deportivo, protector hepático, reparadores de tejidos, mejoras en la fenilcetonuria y en la disquinesia tardía.