Por cada hora que reducimos la duración del sueño, más disminuye gradualmente nuestro rendimiento cognitivo global. Esta es la conclusión del último estudio llevado a cabo por un equipo de investigadores de la Universidad de Duke (EEUU) y de la Universidad Nacional de Singapur y que recoge la revista Sleep.
Para el estudio, los científicos contaron con 66 adultos sanos mayores de 55 años a los que sometieron a una evaluación neuropsicológica a la vez que utilizaron imágenes de resonancia magnética (para medir el volumen cerebral), con objeto de investigar los cambios en el cerebro asociados con el envejecimiento. Además, a todos los participantes se les realizó un cuestionario para registrar la duración del sueño durante todo el período del experimento.
“Cada hora de reducción del sueño al inicio del estudio aumentó la tasa de expansión anual de los ventrículos en un 0,59%, y la tasa anual de disminución en el rendimiento cognitivo global por 0,67% en los siguientes 2 años, después de controlar los efectos de la edad, el sexo, la educación y el índice de masa corporal”, afirma Michael Chee, líder del estudio. Esto es, quienes habían dormido menos tenían una reducción en su volumen cerebral y una disminución en su desempeño cognitivo, como consecuencia de un envejecimiento más rápido del sistema nervioso.
Según las conclusiones del estudio, para los adultos, dormir 7 horas al día parece ser el equilibrio perfecto para un óptimo rendimiento cognitivo. Menos, ya contribuye a acelerar el deterioro cognitivo de forma gradual pero imparable.
Fuente: Muy Interesante